Stanislav Starchenko: es muy pronto para hablar de sustituir a los artistas por inteligencia artificial

Soy Stanislav Starchenko, fotógrafo e investigador de herramientas de inteligencia artificial (IA) y redes neuronales. Utilizo de manera activa estas tecnologías en el diseño, la fotografía y la producción cinematográfica.

Mi experiencia de trabajo con redes neuronales es de un año y medio. Durante este período, he trabajado con grandes empresas, creando productos para ellas con ayuda de la IA: imágenes y  vídeos. La práctica me ha permitido sacar algunas conclusiones.

Quisiera señalar de entrada que los temas legales de autoría relacionadas con la IA aún no han sido reguladas. El propio concepto de IA aún no es suficientemente autónomo, ya que los algoritmos de las redes neuronales están escritos por un humano. Son entrenadas y educadas a partir de vídeos, imágenes y textos creados previamente.  

La IA no crea en el sentido humano de la palabra, sino que recopila información, lo cual es ciertamente impresionante. Por ejemplo, es posible recrear fielmente la ropa que estaba de moda en los años setenta.

Las redes neuronales son tanto de código abierto (que permite controlar el proceso de creación de imágenes o vídeos) como de código cerrado (donde sólo se puede introducir un texto de consulta). Cada tipo tiene sus propias ventajas y desventajas. Las redes neuronales de código cerrado no son menos eficaces, y a veces son de mejor calidad, e implican un periodo menos costoso de formación de una persona para trabajar con redes neuronales, pero hay que tener en cuenta que, al crear imágenes, las poses de los personajes y otros elementos del encuadre pueden ser imprevisibles.

A las redes neuronales de código abierto les toma más tiempo aprender, mientras que las de código cerrado producen resultados más rápidos. 

Bajo ningún concepto se pretende sustituir a los humanos por redes neuronales e IA, especialmente en diseño o visualización, realización de vídeos o escritura de libros, pero como herramienta adicional son buenos ayudantes para encontrar inspiración o resolver parte de las tareas. Por ejemplo, yo solía crear presentaciones y visualizar el guión de una película.

En la industria del cine se realizan experimentos, por ejemplo, para revivir actores fallecidos o para envejecer a los actores jóvenes con ayuda de la IA. Con la ayuda de la tecnología, puedes crear novelas, misiones tanto en videos como en imágenes.

La IA puede automatizar el proceso de búsqueda de modelos o actores de cine según los requisitos del escenario.

Las redes neuronales se han convertido en asistentes indispensables para los fotógrafos: al procesar imágenes, pueden, por ejemplo, limpiar el fondo de las fotos, hacer básicos retoques, quitar arrugas en la ropa. Lo mismo puede decirse de la IA que mejora la apariencia de actores o personajes de ficción, pero aún es muy pronto para hablar de la sustitución completa del trabajo de artistas y videógrafos por la inteligencia artificial. 

La inteligencia artificial y las redes neuronales se convertirán inevitablemente en parte de nuestras vidas. Tenemos que aprender a trabajar con ellas desde la escuela. Ahora hay dilemas éticos y disputas legales difíciles de resolver relacionadas con estas tecnologías. El tema de regular la IA y protegerla de usos malintencionados también es relevante.

Fuente del trabajo sobre IA gráfica: trabajos de Stanislav Starchenko con ayuda de redes neuronales